Es lo que tiene el frío... que hay que abrigar a nuestros chiquitines. Así que seguimos con capuchas con orejas. Además, esta lana es tan mona, que todo el que ha visto las capuchitas in situ se ha enamorado.
Estas en concreto han viajado a Escocia, para dos hermanos. El interior de las orejitas rosa para Ana, la mayor, y gris para John, el pequeño.
Allí, seguro que les va a hacer falta durante más tiempo... Y aún tengo una más terminada, en este caso para mi ahijada. Creo que se la darés esta semana a su mama...El patrón, lo teneis en la primera entrada sobre capucha a ganchillo con orejas. Pero están hechas con medio punto alto en vez de punto alto.
Estoy por hacerme una capucha para mí, la verdad. Y así voy a juego con mi princesa.
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