A mí es que me encanta cómo quedan estos cartelitos pegados en la puerta de la habitación de los peques... Y además son prácticos, porque, al darles la vuelta, todo el mundo sabe que dentro está el bebé durmiendo, y así no entramos como un elefante en una cacharrería... Y se pueden hacer en el color que se quiera. ¿Os gustan?
A mí es que me encanta cómo quedan estos cartelitos pegados en la puerta de la habitación de los peques... Y además son prácticos, porque, al darles la vuelta, todo el mundo sabe que dentro está el bebé durmiendo, y así no entramos como un elefante en una cacharrería... Y se pueden hacer en el color que se quiera. ¿Os gustan?
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